Todo parte por desear que la forma de consumir cambie, saliendo de lo lineal hacia lo circular. El planeta y nosotros hablamos de muchas maneras diferentes, pero pocos son los que se atreven a idear y tomar acción.
Venimos de una ciudad pequeña, tradicional tanto en la forma de pensar así como en generar y ofrecer oportunidades, por lo que también, una de mis intenciones antes de siquiera llegar al nombre de la marca, debía plasmarse a través de nuevas y mejores condiciones para que la gente viva más a gusto.
La sustentabilidad no solo se refiere al impacto que generamos a nuestro entorno, sino también, a la manera en que hacemos negocios y conectamos con todo a lo que se relaciona nuestra StartUp (clientes, proveedores, comunidad y equipos de trabajo).
Sabiendo que queda mucho por hacer en temas de contaminación plástica, no solo en el país y sino también en el mundo, siento que con el equipo que existe y existirá, no nos desviaremos de la intención de conseguir dar con soluciones referentes al daño socioambiental.
Por lo tanto, hoy comenzamos con un Clamshell, pero ya estamos apuntando a otros segmentos que necesitan también ser repensados, puesto que la tecnología, entre otras cosas, favorece al cuestionamiento de cómo hacer mejor las cosas.
Es así como nuestra ambición se centra en los por qué detrás de cada paso que damos, siendo conscientes de que toda acción, tiene una reacción y/o consecuencia en la vida.
Todo parte de la base en que Relier se planta como un sueño de tres personas que buscan convertirse en agentes de cambio.
No es raro pensar que, la forma en que transportamos alimentos, se haya transformado en una de las peores fuentes de daño ambiental que conozcamos. Con esto me quiero referir a la crisis hídrica, uso de la tierra, tala indiscriminada de árboles, entre otras maneras en que estamos agotando nuestros recursos naturales.
Me la juego al decir que, si pudiésemos entrevistar a la mayoría de la humanidad respecto a cómo deberíamos consumir, no habría persona que en el fondo no apoye la idea de que todo debiese más equivalente: por cada recurso que extraemos del planeta, debemos buscar la forma en que este vuelva.
Hoy en día tenemos que la producción mundial del plástico asciende a las 460 millones de toneladas, representando un poco más del 3,4% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero (GEI). ¿Es algo de lo que nos sentimos orgullosos? Aquí soy tajante al decir que esto es un no.
Soy el CEO de Relier, donde mi principal tarea es ser, de cierta manera, la piedra angular de este tremendo proyecto.
Para eso me tengo que asegurar de aportar con la mayor efectividad y consistencia en las distintas tareas que se presentan, independiente que haya mucha tensión, estrés o calma en el proceso. Por supuesto, nunca olvidando el propósito, misión y visión de Relier, así como el uso de una comunicación efectiva y empática.
Jamás voy a dejar de decir la suerte que tuve de comenzar todo con personas que son excelentes seres humanos antes que profesionales, donde, sin duda, el mensaje, las estrategias y planificación se potencian muchas veces sintiendo que no hay techo.
Si estuviera solo en esto, probablemente sería un buen Ingeniero Comercial o quizás líder dentro de una empresa, pero, gracias al equipo, aspiro a ser un gran CEO.
Realmente me gusta mucho el deporte. Me mueve, me da energía y hace que las cosas tengan mucho más sentido.
¿Mi favorito? Los de contacto. Descubrir las MMA (Mixed Martial Arts) fue como un “amor a primera vista”. Sigo pensando en el sueño de debutar amateur a corto plazo, sobre todo al ver lo mucho que me cuesta salir de casa antes de que terminen los eventos de UFC, más todavía si son PPV (Pay Per View).
Me relajo y me pierdo escribiendo-leyendo. Comprobé lo real de la idea que se “descubren nuevos mundos”, por lo que estoy seguro de que será algo que jamás dejaré de hacer (pero a mi manera).
¿Estar solo? Un “poquito harto” hobby la verdad, aunque disfruto muchísimo estar con mi gente y darles todo el amor que puedo. ¿Lo que sí? No hay como hablar solo en el día, sobre todo en la ducha, ya que siento que las mejores ideas han venido desde esto mismo.